La exposición Un espíritu en movimiento. Redes culturales de la revista Amauta se inauguró el jueves 7 de setiembre de 2017. En ella se indagan en los vínculos culturales entre la zona central y sur del país a partir de la revista dirigida por José Carlos Mariátegui.
Los curadores de la exposición, Diana Amaya y Mauricio Delgado, y la investigadora de la Casa de la Literatura Yaneth Sucasaca comentaron sobre la muestra y el proceso de investigación.
Inicio
La exposición sobre las redes culturales de la revista Amauta forma parte de una línea mayor de trabajo de investigación en la Casa de la Literatura sobre la historia cultural del país que se ha traducido en muestras como Soñar, hacer, leer: 100 años de revistas literarias, La página blanca entre el signo y el latido y Trazos cortados. Poesía y rebeldía de Magda Portal.
“Como parte de esta línea de trabajo vimos necesario indagar y centrarnos en la revista Amauta y en su editor y director, José Carlos Mariátegui, como un momento importante de articulación en la producción cultural del país”, explica Diana Amaya.
La investigación partió de la lectura de la correspondencia de José Carlos Mariátegui, custodiada por el archivo del mismo nombre. Delimitaron revisar las cartas del periodo en que se editó y se publicó la revista Amauta, la cual se deja de publicar después de la muerte del autor de los Siete Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana.
“Primero fue un proceso de lectura. Luego de selección donde íbamos anotando e identificando actores culturales, productos culturales como revistas, movimientos, publicaciones, diversas. Posteriormente se fue trasladando a una búsqueda más abierta en distintos archivos en Lima y provincias. Por eso decidimos hacer algunos viajes en el centro y sur del país, donde trabajamos la investigación”, añade Diana Amaya.
“Vimos la diversidad de espacios desde donde se comunicaban. Estaban desde el centro, del sur y norte del país. […] Estaba Gamaliel Churata; en Arequipa, Atahualpa Rodríguez; Alberto Hidalgo desde Argentina, donde radicaba; Magda Portal; en el norte, Antenor Orrego y Alcides Spelucin. Estaban en constante comunicación”, anota Yaneth Sucasaca.
Las cartas
El hilo de narración de la muestra Un espíritu en movimiento. Redes culturales de la revista Amauta son las cartas, las cuales acompañan el desarrollo de las ideas que expone cada secuencia.
“Hubo dos variantes (para seleccionar las cartas): el valor afectivo y el valor a nivel de contenido. […] Una carta que para mí es muy potente es la que le escribe Gamaliel Churata a José Carlos Mariátegui. En ella cuenta cómo está iniciando El Boletín Titikaka y cómo en el sur hay todo un movimiento cultural de vanguardia. Y por otro lado le muestra su cariño, entonces, ahí tiene un valor doble: afectivo y cultural”, explica Yaneth Sucasaca.
“Las cartas como género nos permiten ver o diversificar aspectos que no se pueden observar necesariamente en los libros u otras publicaciones, como el lado emotivo y el alcance geográfico que tienen las cartas en el fluir constante de comunicación y de sentimientos que contienen”, agrega Diana Amaya.
La muestra inicia con una instalación en forma de red, que está entrelazada por cartas, la cual fue diseñada por el artista y curador de la muestra Mauricio Delgado. Esta pieza museográfica contiene extractos de cartas de los integrantes de red cultural de la revista Amauta.
“Trataba de que se evidencie primero la copiosidad de temas que esta red discutía: arte, política, educación, teorías, sindicalismo, etc. Y por otro lado que también sea representativa de los territorios que habíamos investigado: Huancayo, Cusco, Puno, Arequipa, Lima, Vitarte”, explica Mauricio Delgado.
“Lo que básicamente esa instalación hace o intenta evidenciar es el nivel de compromiso a nivel sentimental o pasional de estos actores tenían en su desarrollo de ideas”, agrega.
Disposición de la muestra
El artista Mauricio Delgado, quien además de ser curador de la muestra se encargó de la museografía, comentó sobre la distribución del contenido producto de la investigación.
“Era un reto traducir (la información recogida) en un recorrido museográfico y en un cantidad limitada de paredes. Entonces lo que se decidió fue dividir la sala en dos. La primera parte denominada Una promesa de futuro y la segunda sala dedicada a la educación”, explicó.
Mauricio Delgado precisó que usaron dos recursos que ayudaron a ordenar los sentidos y la información en la exposición.
“El primer recurso fue la carta, que va a ser el hilo conductor, el punto de partida, el pie, donde las ideas se discuten, se desarrollan, donde los intelectuales comienzan a debatir”, apuntó.
“Por otro lado, nos hemos apoyado bastante en la gráfica de las revistas, el grabado y el grabado indigenista específicamente cobra, una gran relevancia, es la voz estético-política desde la cual esta red debate con el resto de esos interlocutores del momento”, añade.
El centro y sur del Perú
La exposición Un espíritu en movimiento. Redes culturales de la revista Amauta se centra principalmente en cómo las relaciones de José Carlos Mariátegui con los intelectuales del centro y sur del país en el marco de esta publicación detonaron proyectos culturales, ideas de renovación articuladas en una gran red de comunicación y debate.
“Decidimos abordar el centro y sur del país, debido a que en la correspondencia de Mariátegui notamos que la comunicación era mucho más fluida con estos espacios. Y por otro lado, desde el centro y sur del país existe todo un movimiento cultural fuerte y continúo desde antes e incluso después de Amauta“, explica Yaneth Sucasaca.
“El sur produjo propuestas específicas educativas, artísticas que nos interesaron para pensar cómo se reformuló a inicios del siglo XX la producción estética, artística, plástica y literaria del país”, agrega Diana Amaya.
Trabajo con archivos
Uno de las cosas que más destaca en la exposición es la gran cantidad de piezas museográficas, muchas de ellas prestadas por archivos personales de autores.
“El trabajo que hizo la Casa de la Literatura (con los archivos) fue acercarse de manera personal. Desde la emotividad y la identificación por las preocupaciones sociales y políticas fue acercándose a estos archivos para poder trabajarlos y revalorarlos”, explica Diana Amaya.
“El trato con los archivos ha sido siempre muy cordial. (Estuvieron) muy dispuestos a prestarnos cosas. La serie de grabados que abre la exposición es muestra de eso. Son justamente piezas de ambos archivos: José Carlos Mariátegui y Luis Valcárcel”, expone Mauricio Delgado y finaliza: “Creo que sin la participación de ellos no solo la muestra no hubiera podido ser, sino que la investigación no hubiera sido tan rica como fue”.
Más allá de la exposición
La exhibición Un espíritu en movimiento. Redes culturales de la revista Amauta tiene un importante valor documental y cultural. Por ellos, los curadores de la muestra destacaron distintos aspectos de la muestra.
“Es un periodo de la historia de la cultura peruana muy rico en producción y contraviniendo varios criterios de hoy, por ejemplo, el centralismo, esta red se desarrolla muy fuertemente en todos los espacios donde está. […] Esta red avanza mucho, propone muchas cosas, es realmente la vanguardia de su tiempo”, explica Mauricio Delgado.
“Por otro lado, hay información que es inédita, a la cual no puede acceder el público regular como son las cartas. […] Hay muchas cartas de Mariátegui a Churata, a Valcárcel, a intelectuales y profesores en Sicuani, Cusco, Puno, que es muy rico conocer”, agrega.
Para la investigadora Yaneth Sucasaca es importante visitar la exposición porque permite conocer a otros actores de la historia cultural de nuestro país y muestra a José Carlos Mariátegui como un gestor cultural “que generaba redes”.
“Te muestra a José Antonio Encinas; los hermanos Peralta: Diego Kunurana, Gamaliel Churata y Alejandro Peralta; Julio Genaro Gutiérrez; Guillermo Mercado; Gamaniel Blanco; Adrián Sovero; Rafael Tupayachi; Francisco Chuquiwanka Ayulo; Inocencio Mamani; personajes que normalmente no son parte de la historia cultural del país. Me parece importante traerlos a la actualidad, mostrarlos y presentarlos ante el público escolar y extranjero”, expone Yaneth Sucasaca.
“Esta exposición nos permite ver cómo desde distintos lugares del país se articularon en una serie de intereses y preocupaciones para la renovación cultural, literaria y social. Además, va a permitir al visitante observar estos vínculos y pensarlos desde la actualidad”, añade Diana Amaya.
Horario de visitas:
Martes a domingo de 10:00 a.m. a 7:00 p.m., en la Sala de Exposición 2 de la Casa de la Literatura Peruana (Jr. Áncash 207, Centro Histórico de Lima). Ingreso libre. Abierta hasta el domingo 15 de abril.