El Premio Nobel de Literatura 2010, Mario Vargas Llosa, visitó la exposición Sebastián Salazar Bondy. El señor gallinazo vuelve a Lima, que la Casa de la Literatura Peruana inauguró en noviembre de 2014, en conmemoración de los 50 años de la publicación del ensayo Lima la horrible.
Acompañado de su esposa Patricia y de su primo Luis Llosa, el novelista recorrió la muestra y recordó, a través de las fotografías, artículos y libros, la gran amistad que lo unió con el polifacético escritor peruano, cuya muerte prematura, a los 41 años, frustró su labor como promotor cultural.
“Él era un magnífico escritor. Era un poeta, autor de teatro, de cuentos, crítico literario y de pintura, pero quizás entre todas las cosas que era Sebastián la más importante, para nosotros los escritores jóvenes, era su gran labor de promotor cultural. Nadie se puede imaginar la importancia que tuvo como gran animador de actividades culturales. Era una persona que motivaba muchísimo a la gente a asistir a exposiciones, a obras de teatro, y era una persona extremadamente generosa, porque ayudó muchísimo a los escritores jóvenes”, señaló Vargas Llosa, quien recordó que Salazar Bondy fue quien más argumentos a favor expresó para que su cuento El desafío obtuviera el premio que lo llevó a París, en enero de 1958.
A cada paso de la muestra, que por primera vez reúne material de archivo conservado por la familia de Salazar Bondy, el Nobel peruano recordaba anécdotas con el autor homenajeado, quien –según dijo- “era un gran contador de chistes”, y siempre era el centro de atención en las reuniones de fin de semana. Asimismo, señaló que para él fue una sorpresa la noticia de su muerte, ocurrida en 1965, la cual se produjo apenas días después de que se despidieran en el aeropuerto de Lima. “La muerte fue una especie de vendaval que no solamente terminó con Sebastián sino con todo lo que él representaba. Creo es un vacío que nunca más se ha vuelto a llenar en el Perú”, anotó.
Respecto a la vigencia de Lima la horrible, el narrador sostiene que la capital ha cambiado mucho, ya no es la ciudad de espaldas al Perú. “Lima ha cambiado enormemente y es muy representativa de lo que es el Perú. Todo el Perú está muy representado en Lima, desde el punto de vista cultural, étnico, racial, en esa época no”, manifestó.
LA VALORACIÓN DE SU OBRA
Finalmente, Vargas Llosa señaló que la poesía de Salazar Bondy aún no ha sido suficientemente valorada, así como su labor como autor de teatro, sobre todo en una época en que hacerlo era una tarea “heroica”. “Creo que haciendo las sumas y las restas, Sebastián Salazar Bondy es una de las figuras de la literatura peruana que todavía no ha sido suficiente reconocida, valorada en todo lo que significó”, señaló el novelista.
La muestra Sebastián Salazar Bondy. El Señor Gallinazo vuelve a Lima puede visitarse hasta fines de mayo en la Casa de la Literatura Peruana (Jr. Áncash 207, Centro Histórico de Lima), de martes a domingo de 10 a.m. a 7 p.m. Ingreso libre.