La Casa de la Literatura Peruana lamenta informar el fallecimiento del narrador, profesor universitario y diplomático Carlos Eduardo Zavaleta, quien fuera una de los autores más representativos de la narrativa peruana del siglo XX.
Desde el comienzo de su carrera fue considerado como un innovador de las técnicas narrativas, alejándose del indigenismo reinante y buscando una literatura nacional, mestiza. Fue reconocido por su fecunda obra narrativa y por ser el primero en introducir en nuestro país los estudios sobre el escritor norteamericano William Faulkner.
Zavaleta nos acompañó en la Casa de la Literatura Peruana en varias oportunidades. En febrero del año pasado, cuando ofreció una conferencia magistral sobre Ciro Alegría y fue aclamado por el público asistente y los días jueves de junio y julio del año pasado, fechas en que el escritor estuvo presente en la Sala del Autor, conversando con los escolares y el público en general sobre su vida, obra y dando tips sobre cómo escribir cuentos y novelas. Estas tertulias fueron muy aclamadas y congregaron gran cantidad de público y se percibió la emoción de los escolares de poder dialogar con un escritor de su talla.
El velatorio se realizará en el Centro Cultural de San Marcos – La Casona (Av. Nicolás de Piérola 1222) a partir de hoy, a las 3:00 p.m., y mañana miércoles, a las 4:00 p.m., será trasladado al cementerio de la Policía Nacional del Perú de Chorrillos, en donde se realizará su crematorio. Previamente, a las 11:30 a.m., San Marcos, su alma mater, le dará un último adiós con un sentido homenaje póstumo.
Carlos Eduardo Zavaleta (Caraz, 1928 – Lima, 2011) fue un escritor que ha tenido gran influencia en la evolución posterior de los géneros narrativos en el Perú. Gran lector de Faulkner y de Joyce, introdujo las nuevas técnicas del relato en nuestro medio, principalmente el monólogo interior. Con este nuevo instrumental se dedicó a renovar la novela agraria y provinciana, introduciendo en ella a parte de los conflictos sociales, el análisis psicológico profundo de los personajes.
Se graduó en San Marcos con dos tesis sobre William Faulkner. Se doctoró en 1958, año en que también ingresó a la cancillería. Colaboró en el comité de redacción de la revista Letras Peruanas, cuyo director fundador fue Jorge Puccinelli. Desempeñó cargos diplomáticos y fue enviado como agregado cultural a Bolivia (1964-1969), consejero cultural en México (1969-1973), y ministro de asuntos culturales en España (1973-1980) y Gran Bretaña (1986-1992).
Ganó los Juegos Universitarios de San Marcos (1948), el del IV centenario de la Universidad de San Marcos (1951), los nacionales de fomento a la cultura Ricardo Palma (1952 y 1960) y Manuel González Prada, este último por su ensayo sobre Faulkner; el de cuento del diario La Prensa (1953) y de la revista Cuadernos por la Libertad de la Cultura (París, 1965); el premio de novela José María Arguedas (1973) y el de novela de la Municipalidad de Lima (1983).
Sus Publicaciones
Publicó los libros: El cínico (1948 ), El Cristo Villenas (1954), Los Ingar (1955), Los Presentes (1956), Unas manos violentas (1958), Vestido de luto (1961), Muchas caras del amor (1966), Niebla cerrada (1970), Los aprendices (1974), El fuego y la rutina (1975), Un día en muchas partes del mundo (1979), Retratos turbios (1982), La marea del tiempo (1982), Un herido de guerra (1985), Un herido de guerra. La marea del tiempo (1987), El cielo sin cielo de Lima (1987), Unas cuantas ilusiones (1992), Un joven, una sombra (1992), E1 padre del tigre (1993), Campo de espinas (1995), El precio de la aurora (1997), Cuentos completos (1997), Pálido pero sereno (1997), Huérfano de mujer (2008).